CINE

-Mujer y escritura en Diana Morán.
DIANA: MUJER, LITERATURA, SU IMAGEN EN LA SOCIEDAD ACTUAL
GRISELDA LÓPEZ
Deseo iniciar esta intervención señalando lo extraordinario de este encuentro, MUJER Y ESCRITURA EN DIANA MORÁN, que aglutina a mujeres que se identifican con las luchas de la humanidad,  significa que ni la cárcel, ni el exilio, ni la muerte, ni el tiempo, han borrado las huellas de esta magnífica mujer de pómulos salientes, de voz estremecedora, de rostro anguloso y de facciones indígenas, indomable, tierna, luchadora y sobre todo terca, terquísima.  Diana fue poetisa y ensayista, pero también fue periodista porque testimonió en el lenguaje propio de la literatura, hechos trascendentales que estremecieron nuestra patria.
Al abordar el tema central de esta mesa que nos reúne sobre una temática que es necesario profundizar, considero que desde un aspecto comunicacional, es posible hallar una ubicación del periodismo con relación a la literatura a través de un análisis exhaustivo de los géneros, un orden donde se ubica el periodismo literario y la literatura periodística en torno a la noticia y la información, como modos de enunciación y discurso.
A través de la historia ha habido una intensa discusión de los escritores ante la Real Academia Española, con el surgimiento del periodismo vinculado con la literatura y se considera la existencia de un periodista escritor y un escritor periodista. En el estudio lingüístico diversos autores establecen factores comunes entre literatura y periodismo, con un esquema de la problemática.
ASPECTO COMUNICACIONAL
Si se quiere diseñar un símbolo que represente la ubicación del periodismo entre la literatura y la comunicación, se elegiría a un árbol: las raíces, la comunicación (oral y escrita), el tronco, la literatura y las ramas el periodismo.  Esta idea surge de las palabras de Montoro, quien afirma que el periodismo y la literatura "son como la rama y el tronco, que no pueden vivir por separado". (Acosta Montoro, 1973) Tanto la literatura como el periodismo se alimentan a su vez de la comunicación, ya que desde este punto de vista toda creación (periodística o literaria) puede ser considerada como una palabra global, que el lector llena de sentido, según su conocimiento de la lengua y su experiencia personal.
En las tradicionales definiciones de literatura: "compromiso", (Sartré, 1962) "búsqueda de la subjetividad", (Eliot, 1959) "de la imitación de la realidad–mímesis", (Aristóteles, 1982) se sumaría la propuesta de Graciela Montes: un acercamiento entre la realidad y la fantasía. "La literatura es una búsqueda nueva, ni un sueño de fantasía divagante, ni el realismo mentiroso.
La historia nos ha demostrado que la afinidad periodismo y literatura cada vez es más común con un excelente resultado en la calidad de las obras.
En Panamá han existido y existen escritores y periodistas notables que han dejado obras tanto literarias y periodìsticas de gran envergadura.  podríamos mencionar a José Agustín Cajar Escala, Moisés Torrijos Herrera, Pedro Rivera, Bertalicia Peralta, Ramón Oviero, Dimas Lidio Pitty, Tristán Solarte, Joaquín Beleño, Mario Augusto Rodríguez, Carlos Francisco Changmarín,  Ramón H. Jurado, Herasto Reyes, Justo Arroyo, Alvaro Ménendez Franco, José Franco,  Itzel Velásquez, César Young Núñez, Gil Blas Tejeira, entre otros.
Durante los sucesos del 9 de enero de 1964 los periodistas dieron testimonios inmediatos de los dolorosos hechos y las páginas  de los periódicos nos sirven como evidencia histórica necesaria para que la memoria no olvide.
Me permito en el marco de esta mesa resaltar el valor testimonial de Diana Morán en sus trascendentales libros como Soberana presencia de la patria, En el nombre del hijo, Gaviotas de cruz abierta, Reflexiones junto a tu piel entre otras,  
Conocí por primera vez a Diana Morán en un recital poético en el Sindicato de Trabajadores de Panamá, su voz llenaba todo el espacio y mantenía en pie al auditorio. De allí la seguí junto a otros estudiantes en cualquier lugar donde se presentara. Era el tiempo de la lucha por la reivindicación de ese espacio que llamamos Zona del Canal, y hoy después de muchas luchas se ha incorporado plenamente a nuestro territorio., Diana leía sus poemas, en los sindicatos, en las escuelas, era invitada por obreros, trabajadores, estudiantes, mujeres organizadas que encontraban en su voz y su poesía una inspiración y esperanza en medio de porvenires inciertos. Como periodista traté de recoger en diversas formas sus denuncias. Diana en su poema Eva Definida traslada ese sentimiento e identificación con las obreras, las mujeres que trabajaban en condiciones paupérrimas: Mujer... Eva de sed esperanzada irrumpo en tus corrientes materiales para beber las aguas sindicales, cabecillas de carne desgarrada.
En mi juventud trabajé en el Diario Crítica,  periódico que me asignó una página quincenal sobre literatura en donde entrevisté a escritores y poetas. Tuve la oportunidad de entrevistar a Diana varias veces, en diversas ocasiones en donde me manifestó su criterio sobre la literatura panameña y su obra en entrevista publicada en febrero a raíz de haberse ganado El Primer Premio de Poesía Ricardo Miró, 1965 con el libro Gaviota de Cruz Abierta. Sus pensamientos expresados en esta entrevista.
“El tema de mi libro Gaviotas de Cruz Abierta, es patriótico, En esto rindo homenaje a los mártires del 9 de enero La forma en que invariablemente ocurre fue condicionado por el fin que perseguía. Escogí las formas de las antiguas rondas y juegos infantiles, de allí el empleo del metro corto, con la aspiración de que los niños de mi patria hicieran rueda diaria con mis versos, enlazados de la mano, sin pretensión alguna de que recordaran mi nombre, sino más bien, con el propósito impersonal  de educarlos en el ejemplo de amor, lealtad y sacrificio que se debe a la patria, enaltecido por nuestra Maritza, nuestro Víctor Manuel, nuestro Ascanio y todos los otros, nos señaló Diana, El libro lo empecé a concebir desde los primeros días de enero del 64, pero solo pude darle remate cuando encontré sosiego, tras la profunda conmoción que sufrí por el genocidio norteamericano”.
Enfatizó que el artista es un ser humano pensante y comprometido, obligado a enfrentar su circunstancia histórico-social.Condeno al escritor que se erige en pequeño Dios, sin responsabilidades. La obra poética es un hecho social. En mi caso, yo reflejo a través de la maduración, dentro de mi yo íntimo, distintos aspectos positivos del mundo de donde vengo y en el que vivo”.
Al interrogarle sobre el papel de la obra literaria, Diana considera que la  obra literaria de importancia, sólo es la que realiza y cumple una misión social, mediante el empleo equilibrado de los recursos idiomáticos originales, imaginativos y formales que van a definir su calidad estética,
Sobre la poesía “que ella ha nacido de sus remotos interrogantes, ante un mundo desconocido, con ello ha ido desgarrando las sombras has encontrar la verdad”. Como manifestación artística la poesía no es inferior a los otros frutos de la literatura ya que por su razón humana ha servido y sirve de sustento inagotable a diversos géneros literarios.
Aquí en estas frases de Diana encontramos las coincidencias entre periodismo y literatura que en esencia es la búsqueda de la verdad.
En otra entrevista que le realizamos  Diana nos manifiesta que la función y características de la poesía, no escapan en general a la función y características del arte. “La poesía es creación de los seres humanos dentro de su circunstancia y tiene como destinatarios a seres humanos. Con este juicio queda claro que la poesía nace dentro de la sociedad y tiene una misión social que cumplir. En un mundo injusto, la poesía para no ser inocua, debe tocar las llagas de la humanidad  y asistir a los deseos  sufrimientos y aspiraciones de los hombres y de los pueblos,  Sólo en un mundo justo el arte podría asignarse la función de recrearse y entretener”.
Diana refuerza el criterio de que el periodismo y la literatura deben responde a las necesidades de la sociedad enfatizando que el poeta que nutre sus temas del ser humano, principio y fin de todas nuestras preocupaciones, trasciende.
Diana se fue al exilio y fue doloroso recibirla en un ataúd en el aeropuerto. Ella que soñó volver a la patria se convirtió, como dijo en uno de sus poemas mis muertos son vivas sembraduras, en una sembradura inagotable, por eso estamos todos aquí hoy sembrados todos de Diana, convirtiéndonos todos en esa Diana multiplicada que tanto necesita esta humanidad.


           



No hay comentarios: